#Bolivia | Los socialistas mexicanos agrupados en el Grupo de Acción Revolucionaria, condenamos y repudiamos el golpe de Estado perpetrado por la extrema derecha de Bolivia y encabezado por militares y policías de Bolivia.
En el transcurso de estas 48 horas se han vivido momentos cruciales en la historia política del país andino; grupos de policías al servicio de la oligarquía blanca y pro imperialista, se sublevaron contra el gobierno del MAS encabezado por Evo Morales, para asestar un golpe crucial que sería rematado por los militares.
El golpe ocurre después de 3 semanas de movilizaciones populares comandadas por dirigentes de la derecha oligárquica, quienes por fin lograron articular un movimiento popular apoyándose en los sucesivos errores de Evo Morales, principalmente el del año 2016, dónde perdió el plebiscito para su reelección.
La derecha golpista, que en cualquier parte del mundo desprecia la democracia y la legalidad, sobre todo cuando se cuestiona sus intereses, denunció fraude electoral en las recientes elecciones de Bolivia; organizó violentas protestas y se respaldó con las acciones de presión diplomática internacional contra el gobierno de Morales.
Los opositores comandados por la oligarquía han quemado casas y vejado a funcionarias y funcionarios del poder ejecutivo, legislativo y judicial, por distintas partes de Bolivia; también a representantes, mujeres y hombres, de los distintos movimientos sociales que han acompañado por más de una década el proceso.
Las imágenes que vienen de ese país recuerdan las acciones de los fascistas en España y en tantas partes del mundo: quema de viviendas, persecución y asesinatos, financiados por la oligarquía.
Este golpe revela el profundo desprecio que existe por el pueblo indígena que es mayoritario en ese país. En este momento se llevan a cabo acciones de venganza porque los desposeídos los sacaron del poder durante 14 años, y porque a pesar de todo, el gobierno boliviano desenmascaró los falsos paradigmas del crecimiento económico que, decían, sólo podríalllegar de la mano del Fondo Monetario Internacional, pues la economía de Bolivia es la que más ha crecido en la última década en toda América Latina.
Al día de hoy en las calles hay movilizaciones en apoyo a Evo Morales, mientras que los fascistas se encuentran dando caza a todo tipo de funcionarios de Estado, intentando aprehender incluso a Evo Morales, para no dejar ningún icono de la resistencia que debilite una contraofensiva de parte de los sectores indígenas y populares. Es crucial lo que ocurra en las siguientes horas en Bolivia.
Desde el Grupo de Acción Revolucionaria condenamos este artero golpe y llamamos a movilizarnos por su derrota en toda América Latina. Que ningún gobierno abra sus puertas a la derecha fascista, golpista y criminal; que ninguna organización de izquierda deje de pronunciarse contra este crimen con olor a Operación Cóndor.
Decimos que la verdadera unidad de América Latina, es la unidad de los explotados y los oprimidos en una lucha común por expulsar al imperialismo de nuestros países; es un proceso que nos lleve a la construcción de los Estados Unidos de América Latina, para definir nuestro rumbo en comunidad con el pueblo latinoamericano, con quién tenemos coincidencias históricas, culturales, de lucha y de represión.
Exigimos al gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, todas las garantías para asistir oportunamente tanto en la embajada de México en Bolivia, como en las distintas residencias diplomáticas, a las y los funcionarios bolivianos y a las y los representantes de las organizaciones sociales, que están siendo perseguidos en este momento por los oligarcas fascistas.
El día de mañana habrá una movilización en la embajada de Bolivia en México a las 5 de la tarde y proponemos que no se le entregue la embajada a la derecha pro imperialista que encabezan Mesa Gisbert y Luis Fernando Camacho.
Externamos la solidaridad del pueblo boliviano que comenzará a escribir un nuevo capítulo de su historia en las calles; esta lucha no está concluida y las cartas están en manos de los sectores indígenas y populares de Bolivia.
¡Ni un país atrás!
Grupo de Acción Revolucionaria.
Juventud Revolucionaria
Rosas Rojas
