Isael García
Desde la implementación del modelo capitalista se conoce que es tendencia la explotación de los recursos y el acaparamiento de las riquezas que son producto de éstas a una minoría dominante.
Tan sólo en el transcurso del año pasado las personas más ricas del mundo agregaron 1.2 billones de dólares a sus fortunas, sumando un total de 5.9 billones, y el patrimonio neto colectivo de las 500 personas más ricas del mundo aumentó en un 25% (Redacción, 2019). Dando como resultado una situación de desigualdad insostenible, entre los que controlan los medios de producción (los burgueses) y la mano de obra barata (el trabajador). Ocasionando una brecha ridículamente abismal, y para poder imaginar esta distancia, en éstos momentos los 8 hombres más ricos del mundo poseen lo mismo que 3 mil 600 millones de personas, los 22 hombres más ricos del mundo poseen mayor riqueza que todas las mujeres de África; mientras que la mitad de la población mundial sobrevive con 5.50 dólares al día o menos. (Coffey, Espinoza Revollo, & Parvez Butt, 2020).
Ningún país se escapa de esta brecha enorme, ni siquiera los más desarrollados. Veamos el caso del máximo exponente del modelo de libre mercado, Estados Unidos. Su índice GINI (este índice nos permite cuantificar la desigualdad, siendo 0 perfecta igualdad y 1 perfecta desigualdad) es del 0.4897 siendo el más alto en 50 años, esto se traduce en que la gran parte de la riqueza está en las manos de una élite, siendo éstas sólo el 10% de la a población estadounidense, que posee el 69% de la riqueza nacional (74 billones de dólares), mientras que la mitad más pobre, 60 millones de hogares, cuenta sólo con el 2% de la fortuna nacional (2 billones de dólares) (Redacción, 2019).
Son datos difíciles de imaginar porque son de carácter extraordinario, tocando a lo fantasioso. Pero, ¿Será cierto que esa ingente cantidad de fortuna es derivado del esfuerzo del burgués, ganado a base de trabajo y desgaste como nos lo llegan a plantear? No, aquellos burgueses lo más probable es que ya se encontraban en la opulencia cuando nacieron, porque se estima que una tercera parte de su fortuna proviene de herencia y el aumento de sus fortunas deriva de la faena del miles de millones de trabajadores que se les paga sólo una fracción de su trabajo, las políticas que les permite hacer esta explotación, la condonación de impuestos y se estima que las grandes fortunas eluden hasta el 30% de sus obligaciones fiscales, es decir, hacen evasión y elusión fiscal. Todos estos factores dan como resultado el incremento en su fortuna, que más allá de merecida es producida por el esfuerzo de millones de trabajadoras y trabajadores, y por el deslinde de sus obligaciones fiscales que provocan pérdidas al Estado, ya que la elusión fiscal de las multinacionales priva a los países pobres de 100 mil millones de dólares anuales en ingreso fiscal (Coffey, Espinoza Revollo, & Parvez Butt, 2020).
Entonces, se puede deducir que es una élite aristócrata consolidada que la clase trabajadora mantiene, que carga en su espalda como Atlas al mundo ¿Para qué? Es un trabajo sin propósito porque la riqueza generada por el trabajador termina en las manos del burgués y éste siempre intenta regresar una porción efímera de lo ganado, dejando al trabajador en condiciones de miseria que en muchos casos ni siquiera les permite alcanzar un nivel mínimo de vida.
Factor clave para cambiar el sistema
En este modelo económico de explotación hay un sector el cual ha sido el más sojuzgado y que es factor clave para que se pueda abolir el capitalismo, hablo de las mujeres. Son las que tienen menores ingresos y activos en comparación con los hombres, constituyen la mayor parte de los hogares pobres y para ejemplificarlo, hay 122 mujeres que viven en situación de pobreza extrema por cada 100 hombres (Coffey, Espinoza Revollo, & Parvez Butt, 2020).
La élite dominante, compuesta casi en su totalidad de hombres, se aprovecha de las creencias y valores para restarle autonomía a la mujer, derivando en normas sociales patriarcales que obligan a las mujeres a realizar las tareas de cuidado como si fuera un rol natural, cuando es el Estado el que debería de ser el encargado de proveer estos cuidados. Por lo tanto es trabajo no remunerado o mal remunerado y este trabajo, realizado casi completamente por mujeres en todo el mundo entre 15 o más años, tiene un valor económico de 10,8 billones de dólares anuales, según los cálculos más conservadores porque el parámetro en que se basa es el salario mínimo y tan sólo contempla aquellos países de los cuales existen los datos.
Es un sistema completamente dominado por hombres, en el cual éstos poseen un 50% más riquezas que las mujeres y ellas están ínfimamente representadas en los puestos de poder, siendo que 18% de los ministros y 24% de los parlamentarios (a nivel mundial) son mujeres.
Por lo tanto no sólo el trabajador es un factor crucial para la abolición de este sistema capitalista, sino que también es imperioso la participación de la mujer trabajadora para abolir este sistema que sólo ha hecho que las riquezas se acumulen en una minoría, compuesta casi en su totalidad por hombres, a costa de una explotación sistemática hacia las trabajadoras y trabajadores.
Es claro que no existe una libre competencia sino grandes multinacionales que se adueñan del mercado, es claro que los burgueses no renunciaran a sus riquezas masivas para apoyar al proletariado, es claro que bajo este modelo económico las relaciones sociales, las instituciones políticas y jurídicas, las ideas y modos de pensar se van a acoplar para el beneficio de la clase dominante (el burgués).
México bajo este marco global
Abordando esta problemática de la acumulación de las riquezas desde una óptica global, veremos las repercusiones que ha tenido en el país y como el gobierno actual, aunque sea caviloso sobre la situación nacional, no logrará grandes cambios bajo el yugo de un sistema capitalista; que hemos visto cómo ha ocasionado una brecha de desigualdad provocado por la expoliación del burgués a la trabajadora y trabajador.
La situación del la trabajadora y el trabajador frente al burgués no mejora en el país, mientras los seis mexicanos más ricos posean mayor riqueza que 62.5 millones de mexicanos. La clase trabajadora en México es alrededor de 47 millones de mexicanas y mexicanos, de los cuales el trabajo remunerado del 67% es equivalente a un salario mínimo hasta cinco, del 29% es menor a un salario mínimo y dentro de este sector 3.1 millones de mexicanas trabajan sin ser remunerados o reciben pagos no monetarios (García, 2019). Por lo tanto, la situación del proletariado frente al burgués en México no mejora. En tanto que el trabajo de cuidados no remunerado, que mayoritariamente hacen las mujeres por este sistema de creencias e ideas que les designa estos trabajos de cuidado como si fuese un rol natural, equivale a 1.7 billones de pesos (Villanueva, 2020). El escenario nacional no mejora con respecto al global y en ciertos ámbitos estamos mucho peor.
No será posible cerrar una brecha de desigualdad en un sistema capitalista que es la causante de alimentar ésta, ya que la naturaleza misma del modelo económico crea la división de clases porque es sustentada por la clase burguesa. Por lo tanto el gobierno actual no podrá lograr aquella transformación que quiere lograr para el beneficio de la población mexicana bajo este modelo económico, por las razones ya expuestas.
Entonces hay que plantear un nuevo modelo económico para dejar a éste que está obsoleto, uno organizado por trabajadoras y trabajadores, uno en el cual no exista una clase dominante que siempre antepondra sus interés a los de la inmensa mayoría y en el cual los medios de producción sean apropiados por las trabajadoras y trabajadores.
“Tiemblen, si quieren, las clases gobernantes, ante la perspectiva de una revolución comunista. Los proletarios, con ella, no tienen nada que perder, como no sea sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo entero que ganar. “
-Friedrich Engels
Referencias
- Coffey, C., Espinoza Revollo, P., & Parvez Butt, A. (7 de Enero de 2020). Tiempos para el cuidado. El trabajo de cuidados y la crisis global de desigualdad . Obtenido de Oxfam México. Recuperado el 8 de Marzo 2020 : https://www.oxfammexico.org/sites/default/files/bp-time-to-care-inequality-200120-es.pdf
- Gómez Mena, C. (17 de Enero de 2018). Imparable la acumulación de riqueza: Oxfam. La Jornada, pág. 18. Recuperado el 8 de Marzo 2020. Obtenido de https://www.jornada.com.mx/2018/01/17/politica/018n1pol
- Redacción, P. L. (2019 de Diciembre de 2019). Multimillonarios agregan 1.2 billones de dólares a sus fortunas este año. La Jornada, pág. 15. Recuperado el 8 de Marzo 2020. Obtenido de https://www.jornada.com.mx/2019/12/29/economia/015n2eco
- García, A. K. (13 de Octubre de 2019). Sólo 4 de cada 100 trabajadores en México ganan más de 15,429 pesos al mes. El Economista. Recuperado el 9 de Marzo 2020 Obtenido de https://www.eleconomista.com.mx/economia/Solo-4-de-cada-100-trabajadores-en-Mexico-ganan-mas-de-15429-pesos-al-mes-20191013-0002.htm
- Villanueva, D. (21 de Enero de 2020). Seis mexicanos, con más riquezas que 50% de la población. La Jornada. Recuperado el 9 de Marzo 2020 Obtenido de https://www.jornada.com.mx/ultimas/economia/2020/01/21/seis-mexicanos-con-mas-riqueza-que-50-de-la-poblacion-858.html
Deja un comentario